Canaletto (Venecia, 7 de Octubre de 1697 – 19 de Abril de 1768),1 cuyo verdadero nombre fue Giovanni Antonio Canal fue un pintor italiano, famoso por sus paisajes urbanos de Venecia dentro del nuevo género de la veduta (vistas generales urbanas). Era hijo del pintor Bernardo Canal, de ahí su
sobrenombre Canaletto.
Su sobrino Bernardo Bellotto en ocasiones usó el mismo seudónimo de Canaletto en su propia carrera.
Entre los muchos paisajes que pintó están las obras sobre el Gran Canal.
Canaletto utilizó la cámara oscura para pintar sus paisajes y en el caso del Gran Canal montaba su cajón en una barca especial. El procedimiento que utilizaba era poner el lienzo en una de las paredes internas de la cámara oscura y en el otro extremo había un agujero con una lente, de manera que la imagen del paisaje que tenía delante se proyectaba sobre el lienzo invertido, tal como sucede en la cámara fotográfica. De esta manera podía hacer el dibujo con gran precisión. Menos mal que en aquella época no existía el “vaporetto” que levanta cierto oleaje y habría movido bastante la barca de Canaletto.
A algunos esto podría parecerles que es poco artístico o que puede suponer que es poco diestro el que lo hace, que es un fiasco, etc. pero no es así. En cualquier profesión el profesional utiliza todas las herramientas y tecnologías que faciliten su trabajo y que le permita realizarlo con mayor precisión y perfección ¿porqué en arte no podemos hacer lo mismo? Lo importante de una obra de arte es el resultado obtenido, no el procedimiento utilizado.
Aunque utilizara la cámara oscura el realismo de las vistas de Canaletto es sólo aparente ya que no tiene ningún problema en alterar la realidad para embellecerla, así los edificios podrían ser más pequeños, menso estilizados o bien estar ubicados en otra posición.
El gran canal de Venecia, auténtica avenida principal de la ciudad, es el cauce de un antiguo río que se puebla de embarcaciones y sobre todo góndolas. La luz nacarada y el cielo azul le dan a la vista un encanto especial. Cromáticamente tenemos el azul del cielo y el azul de las aguas del canal, dos triángulos opuestos y luego están los dos triángulos que contienen los edificios cuyos colores son amarillos y rojos, todo perfectamente equilibrado. Como la luz viene del lado derecho, las fachadas de los edificios de la derecha están en sombra y los de la izquierda en luz, pero observemos que no hay gran contraste entre una zona y otra, esto es cosa del iris del ojo que se adapta a la luz. En una foto aparecería más contraste.
En esta obra sobre EL GRAN CANAL podemos ver una perspectiva perfecta que se enmarca en varios triángulos compositivos que como ya sabemos provoca una sensación de grandiosidad.
Además podemos apreciar grandes ritmos en la repetición de formas como son las góndolas y barcas, los dos edificios con columnas, a derecha e izquierda, los colores de algunas casas que se repiten, amarillas y rojizas, todos estos aspectos hace una obra perfecta y que en su época, estas “vedutas” eran muy apreciadas, especialmente por los extranjeros.