
Los diseños de vanguardia están imponiendo criterios muy definidos al momento de decorar un hogar. Todos los espacios tienen importancia y uno de los que más nos ocupa tiempo es el baño, el cual viene siendo concebido en viviendas modernas como un lugar para la relajación y el bienestar.
Si estás pensando en reformar tu baño, lo más probable es que quieras incluir un nuevo plato de ducha, así como también quieras conocer sobre las mamparas y las columnas para tener un baño totalmente renovado en todos los sentidos.
Es muy importante tener en cuenta el estilo que quieres impregnar en tu sala de baño, pero además decidir sobre los materiales, los colores, la disposición de los elementos imprescindibles, espacio de almacenamiento, entre otros.
En cuanto a los materiales de platos de ducha es importante tener en cuenta los que gozan de mayor valoración en el mercado. En tal sentido, hay platos de ducha de cerámica, de acrylstone, acrílicos y los muy demandados platos de resina.
La instalación es sencilla y además mucho más económica que una ducha de obra, aun cuando requiere de un buen trabajo de albañilería. Este debe hacerse de una forma correcta, ya que cualquier falla en dicha instalación provocaría filtraciones y otros problemas que pueden ser complejos de solucionar.
¿Qué material elegir?
Hay variedad para escoger, uno de los más buscados es el plato de acrílicos por ser el más económico, pero no por eso de baja calidad. Es muy pulcro pero quizás su vida útil no sea igual a la de platos hechos con otros tipos de materiales. También los de Acrylstone que, aunque no es muy conocido, intenta emular a la resina, pero su costo es menor.
Otro material altamente recomendable es la cerámica. Los platos de ducha construidos con este material son muy higiénicos, duraderos y fáciles de limpiar. Sin embargo, es necesario la colocación de una esterilla para evitar resbalones o caídas.
Otro material innovador es el pluston de fabricación italiana. Su calidad está garantizada. Al igual que la cerámica es muy duradero, incluso casi irrompible por lo que el fabricante otorga hasta 20 años de garantía. Es muy higiénico y de muy fácil mantenimiento. También es antideslizante, una ventaja que no tiene la cerámica.
Finalmente, los platos de ducha de resina. Este material trae consigo una combinación de otros como el mármol y minerales. Es una opción que está cobrando mucha fuerza entre la elección de los usuarios, ya que impregna un estilo minimalista y hay una gran variedad de colores y adaptaciones de diseño. Estos son fabricados en una sola pieza y su instalación también es muy sencilla y rápida. A diferencia de las de porcelana, estos sí tienen una condición antideslizante y además son impermeables y antibactericidas. Su precio es un poco superior a otras opciones.
Ventajas de los platos de ducha
Con los platos de ducha puedes ahorrar mucho espacio, por lo que es una elección inteligente, sobre todo cuando se trata de baños pequeños, dejando otros metros cuadrados disponibles para la instalación de estanterías y armarios.
Elegir un plato de ducha en lugar de una bañera es también conveniente, ya que los mismos fabricantes ofrecen modelos de grifería y mamparas que perfectamente llegan a emular un ambiente de spa. Además son muy cómodos y seguros, sobretodo para los niños y adultos mayores que presentan algunas limitaciones de movilidad.
Otro aspecto a tomar en cuenta es que este tipo de duchas comulgan con un sentido de cuidado del medio ambiente, ya que el consumo de agua es mucho menor.