Refranes sobre Trabajar,Negociar y Dirigir. Como es natural, por tratarse de una parte de la cultura popular, los refranes que tratan del trabajo aluden principalmente a oficios artesanales y humildes: sastre, buhonero, ollero, mesonero… Recomiendan el esfuerzo y advierten de que lo más importante en cualquier empresa, es comenzar, por ser lo más difícil y la parte que precisa mayor voluntad. Respecto al comercio y los negocios, combina el refranero las virtudes de la paciencia y la astucia, apuntando como ventajoso poner precios justos y prestar atención al regateo. Por último, en cuanto a dirigir y mandar, los refranes aconsejan mantener las distancias entre jefes y subordinados.
TRABAJAR, ACTUAR
A galgo viejo echadle liebre, no conejo. Dice que cuando se trata con una persona astuta y de experiencia, deben dársele a resolver los casos arduos, no los sencillos y fáciles.
A lo que puedas solo, no esperes a otro. Porque siempre es más lucida y conveniente la obra individual que lo hecho en colaboración. Semejante a Las medias, para las piernas.
A quien cuece y amasa, no hurtes hogaza. Dice que es muy difícil engañar al que es experimentado en determinado asunto.
A quien Dios se la diere, San Pedro se la bendiga. Dice que al que le tocare un trabajo, procure conllevarlo lo mejor posible.
Al gato, por ser ladrón, no le eches de tu mansión. Porque nota que es cazador y cumple con su oficio.
Al mal harinero, los pelos del culo le hacen embarazo. Dice que el que es poco trabajador, en cualquier cosa halla pretexto para no hacer. Son refranes similares: Al no ducho de bragas, las costuras le hacen llagas. También se dice El que no está acostumbrado a bragas, las costuras le hacen llagas. Dice que el desacostumbrado, todo uso se le hace cuesta arriba. Arremangase mi nuera y volcó en el fuego la caldera. Se dice de los que, acostumbrados a no hacer nada, cuando hacen algo lo hacen mal. Semejante a: Para una vez que me arremangué, todo el culo se me vio.
Al que madruga, Dios le ayuda. Recomienda la actividad y el trabajo para medrar.
Al que no quiere caldo, taza y media. Se dice cuando nos vemos obligados a hacer repetidas veces algo que no es de nuestro agrado.
Al verano, tabernera, y al invierno, panadera. Se dice del que cambia los oficios por comodidad.
Alfayate sin dedal, cose poco, y eso mal. Alfayate es como se llamaba antiguamente al sastre.
Antes es la obligación que la devoción. Dice que primero es lo necesario que lo caprichoso. Semejante a Haz primero lo necesario y después lo voluntario.
Aramos, dijo la mosca al buey. Se dice cuando alguien se vanagloria achacándose el trabajo de otro.
Bien está lo que bien acaba.
Cada buhonero alaba sus agujas. También se dice: Cada ollero alaba sus pucheros.
Cambiarás de mesón, pero no de ladrón. Por la mala fama que tienen todos los de este oficio.
Cobra buena fama y échate a dormir; cóbrala mala y échate a morir. Dice que es muy difícil criar buena fama, pero que una vez conseguida se conserva fácilmente; y, por el contrario, cuando se pierde es casi imposible de recuperar.
Como sembrares, cogerás. Dice que el premio corresponde al esfuerzo, en calidad y cantidad.
Con buena escoba bien se barre. Dice que el que tiene medios a propósito puede hacer las cosas con mayor perfección.
Con necios y porfiados, labro yo los mis tejados. Es refrán de procuradores y abogados.
Con un tiro matar dos pájaros. Se dice cuando de una sola vez se solucionan dos asuntos.
Corrida de caballo y parada de borrico. Se dice del que comienza una cosa con gran brío y a termina malamente.
Cuando no aprovecha la fuerza, sirva la maña y la cautela.
Donde hay gana hay maña. Dice que el que quiere una cosa, de una manera u otra intenta procurársela.
El hombre propone y Dios dispone. Se dice cuando inesperadamente surgen dificultades invencibles que imposibilitan los proyectos trazados de antemano.
El mejor escribano echa un borrón. Es la versión popular de la célebre cita latina Aliquando bonus dormitat Homerus (Alguna vez el buen Homero dormita). Se refiere a que también las personas de mayor experiencia y cordura cometen errores.
El que algo quiere algo le cuesta.
El que corre menos, vuela. Dice que el que no se precipita y hace las cosas ordenadamente y con cordura gana más tiempo que los atropellados y rápidos.
El sol sale para todos. Dice que a cada uno Dios le da medios con que valerse.
En casa del herrero, cuchillo de palo. Se dice cuando se carece de alguna cosa de la que por obligación debiera haber gran copia o abundancia.
Entre sastres no se pagan hechuras. Dice que entre personas de una misma condición u oficio se pueden dispensar los beneficios por los servicios prestados mutuamente.
Estas son lentejas; si quieres, las comes, y si no, las dejas. Se dice cuando no hay lugar a elección, sino obligación de aceptar una sola cosa.
La buena fama es como el ciprés, que si una vez quiebra no reverdece después.
La buena obra, al maestro honra.
La honra no tiene más de un golpe. Es como A la honra y al vidrio, un golpecillo. La honra es de una calidad tal que cualquier falta la quiebra y mancilla; por ello se ha de defender con tanto esmero y atención.
La obra alaba al maestro.
La ociosidad es madre de todos los vicios. Porque el hombre desocupado, para entretenerse imagina o aprovecha los vicios.
Lo que más trabajo cuesta, más dulce se muestra.
Lo que mucho vale, mucho cuesta. Da a entender que las cosas importantes nunca se consiguen con poco trabajo.
Lo que no se comienza, nunca se acaba. Se dice a los que ponen muchas dificultades a los proyectos, dando a entender que con voluntad y afán se vencen todos los obstáculos.
Lo que poco cuesta, poco se aprecia. Es lo contrario de lo anterior.
Manos duchas comen truchas. Dice que el sagaz y entendido siempre libra con buena parte.
Más vale antes que después. Es como Más vale tarde que nunca.
Más vale llegar a tiempo que rondar un año. Nota lo provechosa que es la oportunidad.
Nadar y nadar y a la orilla ahogar. Se dice cuando, después de muchos trabajos, se fracasa.
Nadie puede servir a dos amos y contentarlos a entrambos.
Ni ames a quien amó ni sirvas a quien sirvió. Porque habiendo conocido las amarguras de ese estado precedente, exigen para su satisfacción sacrificios muy penosos de conllevar. También se dice Ni pidas a quien pidió, ni sirvas a quien sirvió.
Ni un dedo hace mano, ni una golondrina verano. Dice que es necesaria la repetición de actos o la abundancia de objetos de una misma clase para fundar la costumbre o dar el valor definitivo. Es como Una golondrina no hace verano, ni una sola virtud bienaventurado. Dice que una acción sola no funda costumbre y por ella no puede juzgarse al que la hace. Semejante a Un grano no hace granero, pero ayuda al compañero. Y también a Muchas candelitas hacen un cirio.
Ninguno está obligado a hacer más de lo que sabe y puede.
No hay atajo sin trabajo. Da a entender que todos los trabajos, a pesar de que el hombre se ingenie lo que quiera, tienen su sacrificio.
No hay pan sin afán.
Obra empezada, medio acabada. Dice este refrán que lo principal es decidirse a hacer una cosa, que el finalizarla ya es menos penoso.
Poca diferencia hay entre no hacer una cosa y hacerla y que no se sepa.
Por bien estar mucho se ha de andar. Semejante a El que algo quiere algo le cuesta.
Primero es la camisa que el sayo. Dice que antes debe procurarse lo necesario que lo superfluo.
Principio bueno la mitad es hecho.
Principio quieren las cosas. Aconseja que bien o mal se comiencen, que tiempo habrá después de ordenarlas y reformarlas conforme pida la experiencia.
Quien hace lo que puede no está obligado a más.
Quien fue a Sevilla perdió su silla. Se dice del que habiendo abandonado un lugar o cargo voluntariamente cuando vuelve lo encuentra ocupado.
Quien mucho abarca, poco aprieta. Es como El que mucho abarca, poco aprieta.
Quien todo lo abarca, poco ata.
Quien mucho corre, pronto para. Dice que el que empieza las cosas con mucho afán y rápidamente, luego por este mismo esfuerzo desmaya y las abandona.
Quien quiera peces, que se moje el culo. Dice que el que desea conseguir una cosa debe trabajarla y sacrificarse por alcanzarla.
Quien siembra, recoge. Dice que el que trabaja halla al fin su beneficio.
Quien tiene oficio, tiene beneficio. Dice que el que trabaja medra.
Remienda paño y pasará año. Recomienda el trabajo y el ahorro. También se dice Remienda tu sayo y te durará otro año.
Si quieres el huevo, sufre la gallina. Se dice al que, deseando el beneficio de un negocio, reniega de los inconvenientes.
Son habas contadas. Denota la claridad en las cuentas.
Trabajos, y a la vejez andrajos. Se dice de los que, a pesar de su esfuerzo, no han llegado a medrar.
Unos tienen la fama y otros cardan la lana. Dice que sucede a veces que unos trabajan para que otros se beneficien, y que la fama de los unos se sostiene a costa de las buenas cualidades de otros que permanecen en el incógnito.
Zapatero, a tus zapatos. Aconseja que cada cual se ocupe de lo que le corresponde.
OCASIÓN, OPORTUNIDAD
El que va a la bodega y no bebe, buena vez se pierde. Se dice del que desaprovecha la ocasión. También se dice Quien va a la bodega y no bebe, buena vez se pierde.
Esperando marido caballero, llégame las tetas al braguero. Dícese de los que aguardando una gran oportunidad se les pasa la ocasión.
La ocasión, asirla por el guedejón. Dice que cuando se presenta una buena ocasión no se la debe dejar escapar.
La ocasión hace al ladrón. Dice que muchas veces se hacen cosas malas, no con intención de cometerlas, sino porque la ocasión nos la brinda.
Vos desnuda y yo sin bragas, ésas me hagas. Dice que se aproveche la ocasión cuando se presenta.
COMERCIO, NEGOCIOS
A mala venta, mala cuenta. Dice que cuando el servicio es malo, toda remuneración parece excesiva. O bien que malvender es peor que regalar.
A otro perro con ese hueso. Se dice para rechazar un ofrecimiento o proposición que no conviene.
A río revuelto, ganancia de pescadores. Dice que del desorden de las cosas o negocios siempre se aprovechan los desaprensivos.
Al gorrino gordo, untarle el rabo. Dícese cuando al poderoso se le procuran negocios o asuntos que lo enriquezcan. En general se aplica para todos aquellos casos en que se aumenta la abundancia.
Algo es queso, pues se da por peso. Dice que todas las cosas tienen un valor, aunque en algunas de ellas sea muy humilde.
Antes de contar, escribe, y antes de firmar, recibe. Dice que no es conveniente fiarse, sino acabar los negocios y contratos por sus pasos contados.
Antes de hornar se ven los panes. Recomienda que antes de emprender un negocio se tengan presentes elementos con que se cuenta para su éxito.
Aquí morirá Sansón y cuantos con él son. Se dice aludiendo a la terminación desastrosa de un asunto o negocio.
Callen barbas y hablen cartas. Se dice cuando se da un testimonio de palabra y se quiere por escrito o por obra.
Calles mojadas, cajón seco. Es refrán de comerciante y dice que cuando llueve, el negocio es escaso porque la gente sale menos a la calle. Los farmacéuticos lo aplican para decir que con la humedad, la salud de los enfermos mejora, al tiempo que empeora su negocio.
Con poco viento cae en el suelo torre sin cimiento. Dice que los asuntos o negocios que carecen de fundamento al menor inconveniente se deshacen.
Donde no hay ganancia, cerca está la pérdida.
El carnero encantado, que fue por lana y volvió trasquilado. Se dice de la persona que no solo no logró el objetivo que se proponía, sino que le resultó el negocio al contrario.
El ojo del amo engorda el caballo. Dice que la vigilancia y cuidado de la hacienda y cosas propias redunda en su beneficio.
El que está a las verdes, está a las maduras. Se dice del que participando de los beneficios de un negocio tiene asimismo que soportar las pérdidas o inconvenientes.
El que se traga un hueso, confianza tiene en su pescuezo. Dícese cuando alguien se mete en un negocio de muy difícil solución.
El vino que es bueno, no ha menester pregonero. Semejante a El buen paño, en el arca se vende.
Hacienda, tu amo te vea, y si no, te venda. Dice de la conveniencia de que el dueño vigile sus propios intereses.
Haz barato y venderás por cuatro.
Haz buena harina y no toques bocina. Es refrán de comerciante que dice que, teniendo buenas cosas, pronto se hace clientela sin necesidad de propaganda.
Lo barato es caro y lo caro es barato. La razón está en la duración y bondad de la mercancía cara.
Lo que con unos se pierde, con otros se gana. Da a entender cómo se vive en el mundo, unas veces cediendo con liberalidad y otras aprovechándose de la ocasión.
Más vale mal concierto que buen pleito.
Pesa justo y vende caro. Es buen consejo para mercaderes, porque alcanzarán fama de honrados sin perder beneficio.
Piedra sobre piedra, a las nubes llega. Edificando.
Quien desprecia, comprar quiere. Porque es buena regla comercial fingir escaso interés por lo que se va a adquirir con objeto de no aumentar su precio.
Quien vende barato, vende doblado. Porque vende más.
Si el necio no fuese al mercado, no se vendería lo malo.
Váyase lo comido por lo servido. Se dice de los negocios en que no ha habido ni ganancia ni pérdida.
Vende público y compra secreto, no te sabrán el primer precio.
Vender en casa y comprar en la plaza. Dice que se debe vender cuando lo solicitan y comprar cuando lo ofrecen para conseguir así ventaja.
Vender miel al colmenero. Se dice cuando se va a ofrecer a una persona lo que ella tiene de sobra.
Venta deshace renta. Porque es aminorar la hacienda.
DIRIGIR, MANDAR
Alguacil descuidado, ladrones en cada mercado. Avisa que cuando el que dirige no vigila debidamente, la hacienda sufre menoscabo.
Alguno está en el escaño, que a sí no aprovecha y a otro hace daño. Se queja de la persona que manda, cuya autoridad no es provechosa para nadie.
Averígüelo Vargas. Frase proverbial que significa la dificultad de conocer una cosa. Su origen está en las anotaciones que Isabel la Católica escribía en los informes, haciendo referencia con la fórmula ‘Averígüelo Vargas’, a don Francisco de Vargas, su alcalde de Corte.
Como canta el abad, así responde el sacristán. Dice que los subordinados suelen participar del modo de pensar de sus superiores e imitarlos.
Donde hay patrón no manda marinero. Se dice cuando, a pesar de las iniciativas propias, se tiene que obedecer al que ejerce más autoridad.
El que fue cocinero antes que fraile sabe lo que pasa en la cocina. Dice que cuando se ha pasado ya por una situación se tiene experiencia de lo que debe hacerse en otra semejante. También se dice El que fue monaguillo y después abad, sabe lo que hacen los mozos tras el altar. Y también: El que ha sido cocinero antes que fraile, lo que pasa en la cocina bien lo sabe.
Herradura que chacolotea, clavo le falta. Dice este refrán que en cualquier asunto o negocio, cuando la autoridad del que ha de dirigirlo se debilita o pierde, todo va de mala manera.
Mandar no quiere par. Dice que el que ordene y mande debe ser uno solo.
Ni en burlas ni en veras con tu amo no partas peras. Dice que no es conveniente discutir ni negociar con los superiores, pues nunca suele salirse beneficiado.
Quien manda, no ruega. Dice que la persona cuyo deber es mandar no debe perder jamás su autoridad.